Editorial Arbitraria
103 p.
El pelo atraviesa la existencia, desde el folículo hasta la punta, en formas que todavía ignoramos. Esta crónica/ensayo señala esa relación personal, con todo su significado social. El trayecto inicia con la primera infancia de una niña peluda motilada por la mamá y abandonada por el papá. Sigue con una pubertad incómoda, en la que la búsqueda de una identidad propia choca con la que los demás le quieren imponer: O. (la protagonista) se inicia en la exploración sexual mientras su entorno la quiere someter a la vergüenza y al asco por su cuerpo, que enseña la moral “blanca” y cristiana. Esa sensación de vergüenza a la que intenta oponerse se acumula cuando sufre de acné, cuando le hacen un mal corte y se esconde del muchachito que le gusta, cuando envidia a su prima de cabello dorado, cuando contrasta el comportamiento inquieto que se premia en los niños y se castiga en las niñas, cuando la presionan para que se depile las piernas. Pero ella responde cortándose el pelo al rape, lo que le cuesta, sin saber, ser vista como rara y ser confundida con un muchacho en un nuevo colegio en el que sigue formando su identidad rebelde, una identidad propia, a la que tanto le cuesta llegar.
El tema de este libro es ese recorrido, ese proceso formativo a contracorriente, marcado todo el tiempo por la relación con el pelo, que recoge la oposición al modelo machista de lo que debe ser una mujer. De la adolescencia salta a la formación alterna para aprender a cortar el pelo, de ahí a la vida sexual de pareja, y el remate es la independencia, la posibilidad de cortarse el pelo a una misma, la posibilidad de la emancipación.
La estructura de este relato no obedece a un género, se desarrolla entre la crónica (el relato personal) y el ensayo (las capas más profundas de ese relato). La primera parte se cuenta en tercera persona (tal vez porque en ese proceso formativo todavía no está el “yo” de la autora). Desde la segunda parte en adelante la narración es en primera persona. Cada apartado se cierra o se abre con ilustraciones, con collages de titulares de noticias, con extensiones que dan otros fondos y otras formas a lo que se cuenta.
Este libro es la primera publicación de la editorial Arbitraria. Se nota el diseño con afecto y atención.
En lo personal me gusta la fuerza y la autenticidad de esa voz narrativa. La estética que une esa narración personal, simbolizada en la relación con el pelo, con una argumentación más honda, feminista y necesaria.
A mí no me gusta mi pelo. Casi toda mi vida he intentado cortármelo de raíz o he intentado no pensar en él. Pero el pelo crece, y le dice algo a uno y otra cosa a los demás. Algo he tenido que aprender a hacer con él. Con el tiempo, yo también aprendí a cortarme el pelo solo. Me siento mejor así, y me siento orgulloso de eso, no sé por qué, si en mi caso es un motilado cortico, fácil, tradicional.
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