Sabios de Sodoma, Roberto Bolaño

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¿Este texto es una burla sobre cierta mirada del mundo que encarna Naipul y su crónica, cierto?, ¿y los sabios de Sodoma son Borges y Naipaul?, ¿y esa mirada del mundo que ve a Argentina como un pueblo de bárbaros, machistas, violadores, de costumbres sodomitas, abocado a la perdición, es una mirada clasista y colonialista, no?, ¿y atribuir caprichosamente el origen de las costumbres heterosexuales y zoofílicas sodomitas de los argentinos a su origen campesino italiano y español es un refuerzo de esa idea, cierto? Es que no he leído la crónica de Naipaul, y creo que no la voy a leer, pero quiero intentar interpretar este texto de Bolaño, que es un cuento o un metacuento o un cuento incompleto o algo así. «Sabios de Sodoma» se enfoca en un Naipaul enfocado en hacer una crónica sobre «El regreso de Eva Perón» en 1983 en Argentina. De la misma forma en que Naipaul traza una línea descendente sobre Argentina Bolaño lo hace sobre la crónica de Naipaul, a quien en un primer lugar referencia como un escritor que, por otra parte, me parece admirable; luego lo imagina recién llegado a Buenos Aires, haciendo vida social, tomando notas, prestando atención, viendo el caótico ciclo político centrado en la figura de Perón y su círculo; luego, ante ese presentimiento del infierno que se cernía sobre la ciudad, imagina a Naipaul paralizado por el horror. Luego lo representa socializando con Bioy, en su club de tenis, conversando con sus amigos, pensando que tanto Bioy como sus amigos como el club son todo un monumento a la cretinización; y hasta aquí Naipaul es un escritor reconocido que ha venido a hacer una crónica en Buenos Aires y tiene una mirada crítica y negativa de todo lo que ve, pero es en este punto en que la crónica de Naipaul (su mirada) comienza a descender en visiones de horror y prejuicio que quizá hablan peor de Naipaul y su crónica que de Buenos Aires: Dice Bolaño que nunca había leído páginas tan demoledoramente críticas sobre Argentina, ni siquiera de otro latinoamericano, ni siquiera de un chileno; y la crónica de Naipaul empieza a hablar, abruptamente, de sodomía, de las costumbres sodomitas de los argentinos, de la satisfacción y necesidad de penetrar por el culo a las mujeres, lo que para Naipaul es un acto machista de dominación hermanado con la violación, una práctica que toda sociedad civilizada condenaría; después, en el texto de Bolaño, en la crónica de Naipaul, este último se enferma, ante la presencia de los argentinos, diríase que la sola presencia física de esos argentinos que visita y le hablan le produce una náusea que a duras penas puede contener; para ser contra los argentinos, esto es desproporcionado, ¿no? Esas son sensaciones que Bolaño pone en Naipaul, que hablan más de Naipaul que de Argentina, y que si acaso hablan de Argentina lo hacen para burlarse de esa veneración de cierto tipo de argentinos hacia unos ingleses que los ven como bestias bárbaras. No sé. En el texto de Bolaño se mencionan tres escritores argentinos: Borges, Bioy, Rodrigo Fresán. De Bioy dice que Naipaul piensa que tanto Bioy como lo que lo rodea le parece un monumento a la estupidez, a Borges lo imagina en una visita de Naipaul, y es conocida la admiración y conocimiento de la cultura inglesa por parte de Borges, y a Rodrigo Fresán lo menciona para señalar cómo, a pesar de la admiración y conocimiento que este también tiene por la literatura inglesa, apenas parece recordar esa crónica. Luego empeora más, Bolaño imagina a un Naipaul imaginando cómo las costumbres sodomitas argentinas se originan en los campesinos italianos y españoles, que realizan primero esas prácticas con animales, antes de hacerlas con mujeres. Y el remate es Bolaño cuestionando esa caprichosa imprecisión de Naipaul, Bolaño que sospecha que si el origen argentino fuera griego, ante la mirada de Naipaul, entonces sería un país mejor. Bolaño que remata irónicamente diciendo que, para bien o para mal, Argentina es lo que es y viene de donde viene, que es de todo el mundo (sépanlo, dice) menos de París. Y aquí termina el texto y la línea descendente que remata con ironía que esa mirada de Naipaul viene de una observación arribista (si tuvieran otro origen serían mejores aunque fueran los mismos). Y si pensamos en el título, en los sabios y en Sodoma y lo unimos con Buenos Aires y Naipaul tal vez cerramos el círculo de esa mirada que utiliza caprichosamente la moral, de forma arribista, para condenar a un pueblo por sus costumbres alejadas de ese centro que es el de quien mira y juzga, como siempre han hecho los colonizadores.


[*] [1] Cuentos Completos (2018, Cuentos Póstumos: El secreto del mal, 1998-2003). Editorial Alfaguara. 647 páginas


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