Libro: Obras completas I
Editorial: Emecé
Tercera reimpresión en Colombia, 2008
Este cuento hace parte de un libro publicado inicialmente en 1944, llamado Ficciones. Se subdivide en dos partes: El jardín de senderos que se bifurcan (1941) y Artificios (1944). El Sur es el noveno y último cuento de la segunda parte.
Este cuento también presenta una alternativa al tiempo sucesivo. Ya el protagonista (Juan Dahlmann) había elegido su identidad más inclinada a su antepasado criollo y militar en vez de al europeo y religioso. El criollo y militar le parecía más romántico. Luego, después de golpearse en la cabeza por querer ir rápido a leer Las mil y una noches, es llevado en estado de delirio al hospital, y ahí se le abren dos opciones: morir en ese hospital por una septicemia, o morir en un viaje al Sur (que es el pasado, su pasado) en un duelo a puñal contra un gaucho. Hay una tercera opción, por fuera de ese orden cronológico que se alimenta de Las mil y una noches; y es morir simultáneamente en ese hospital mientras dentro del sueño muere románticamente en un duelo a puñal.
El estilo y la estructura de este cuento también está definido desde los primeros párrafos. Borges tiende a llenar esas líneas de referencias (nombres, fechas, textos, lugares) en las cuáles establece los marcos de la historia, el estilo y el género. Luego desarrolla la narración sucesiva y la narración alternativa (los dos finales) dando pistas del Sur cuando está en el hospital y del hospital cuando está en el Sur. Hasta los últimos párrafos, en los que el protagonista elige cuál va a ser su final, pero deja que el lector elija el propio.
Este texto previo me recuerda a uno posterior de Bolaño, El gaucho insufrible, en el que también hay un viaje del protagonista a un pasado gauchesco que ya no existe. El de Bolaño es irónico, el de Borges es romántico. Del cuento de Borges me gusta la destreza para desarrollar los dos hilos alternos de una forma clara, inteligente y entretenida. En el prólogo a esta colección de cuentos Borges afirma que este texto se puede leer como una sucesión de hechos novelescos o de otra forma. Esa otra forma son muchas, quién sabe si infinitas como en Las mil y una noches. Podría ser leído por ejemplo como un texto autobiográfico, porque la mayoría de los puntos de referencia del protagonista reflejan la vida de Borges. Podría ser leído también como un laberinto de espejos.
¿o qué pensas vos?